Objetivos

Sin embargo, nuestro planteamiento es muy diferente al habitual en los colegios de nuestro país.  Su gran preocupación se centra en trabajar casi única y exclusivamente los aspectos académicos con el niño/a. El profesor/a dedica la totalidad de su tiempo en explicar los contenidos que se incluyen en la programación oficial del Ministerio de Educación. 

Para nosotros la formación de un niño/a se debe centrar en tres aspectos, que son los que van a conseguir que, años después, sea un adulto que tiene un pleno control sobre su vida:

GRÁFICO

Al final la vida es mucho más sencilla de lo que pensamos. Si entre el colegio y la familia, la familia y el colegio, conseguimos que el niño/a se convierta en un adulto:

• optimista, positivo y feliz.
• educado, amable, comprensivo, empático.
• con inteligencia emocional, habilidades sociales y capacidad para trabajar en formato cooperativo.
• si tiene autoestima, asume y acepta su propia personalidad (con sus cualidades y carencias), si tiene confianza en sí mismo y en sus posibilidades.
• si es resolutivo, trabajador, comprometido, humilde, con capacidad de superación.
• si habla un inglés perfecto, un castellano perfecto y un francés muy bueno.
• y es capaz de lograr estudiar lo que le gusta, lo que se le da bien.

Sinceramente, no le puede ir mal en la vida de adulto, ya que va a tener un pleno control sobre la misma; le irá bien o muy bien, pero mal nunca.

Por eso el colegio no se puede centrar única y exclusivamente en el aspecto académico; ya que el resto de factores son tan importantes (o más) que ese.